La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey

La entrada de Bildu en algunas Instituciones y alcaldías del País Vaco y Navarra, me vuelve a recordar un pasaje del delicioso y único libro que escribió Mary Anne Shaffer, "La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey". Está redactado en forma epistolar y en una de las cartas fechada en 1940, se relata lo que un anciano, luchador en la primera guerra mundial, le dice con lágrimas resbalando por sus mejillas a una conciudadana mientras ve desfilar a las tropas de ocupación alemanas por las calles de Saint Peter Port, capital de su isla del  Canal de la Mancha,: "¿Cómo pueden estar haciendo esto otra vez? Les derrotamos y aquí están de nuevo. ¿Cómo les hemos dejado que lo vuelvan a hacer?
 

En junio del 2010 escribía en mi blog: "Me traspasa la amargura de aquel súbdito británico, la comprendo cuando pienso en la posibilidad de que el Presidente Zapatero, su Gobierno y los nacionalistas de cualquier signo que siempre acompañan en estos sucios asuntos, les dejen hacer otra vez lo mismo. Me espanta la constante repetición del actual Ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre la posibilidad de que la llamada izquierda abertzale haga una ambigua declaración de renuncia a la violencia y simplemente esto, les permita volver a las Instituciones. Me producen una enorme preocupación los rumores, ¿o certezas?, de un nuevo diálogo con ETA. Un nuevo engaño sería miserable. Y no me refiero a la izquierda abertzale, es decir a ETA. Es su estrategia. Pero, ¿cuál es la estrategia del Presidente del Gobierno?. ¿Por qué no se ha revocado la resolución aprobada en el Congreso el 17 de mayo del 2005 que permite al Gobierno negociar con ETA?. ¿Por qué se ha permitido a ETA continuar en algunos ayuntamientos hasta el final del mandato?
 

La preocupación de entonces, ha cristalizado. Volvemos, por ejemplo, a la guerra de las banderas como símbolo de la pretensión de que la calle vuelva a ser suya. Las razones por las cuales Bildu, la nueva marca de los colaboradores de ETA o de la misma ETA según el Tribunal Supremo, ha vuelto a entrar en las instituciones vascas y navarras, necesitarán de amplias explicaciones por parte de sus responsables. Pero en principio, es claro que hemos asistido a la crónica de "Una muerte - largamente- anunciada". Y como en la novela de García Márquez, a la vista de la gente que no hizo o no pudo hacer nada para evitarlo. Lo intentaron muchos ciudadanos saliendo a la calle y advirtiendo de lo que podía suceder. Lo airearon la mayoría de los medios de comunicación. Buscaron y hallaron las pruebas necesarias los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Lo certificó el Tribunal Supremo, pero finalmente, un Tribunal Constitucional compuesto por una mayoría de magistrados propuestos por el PSOE, consumó la arbitrariedad. Muchos son los responsables que día a día han ido construyendo la actual situación. Políticos de distintos signo, no sólo del PSOE con Jesús Eguiguren a la cabeza. Habrá que analizar con detalle la responsabilidad que una parte de IU ha tenido. También la del PNV y la del resto de nacionalistas de otras CCAA. Pero hoy, está claro que el responsable último es un Tribunal Constitucional en el que uno de sus magistrados más significativos, su vicepresidente,  ha declarado: "Me he sentido en un Tribunal secuestrado". La gravedad de esta afirmación, a un ciudadano de a pié como yo, le deja sin palabras y hondamente preocupado por la deriva en la que ha entrado una de las más altas Instituciones del Estado. Como un servidor público más, es imprencidible que este magistrado, explique ya, por quién se ha sentido secuestrado. Quién o quienes han podido secuestrar al que se define como"el intérprete supremo de la Constitución. Único en su orden y con jurisdicción en todo el territorio nacional, ejerce las competencias definidas en el artículo 161 de la Constitución. El Tribunal Constitucional es independiente de los demás órganos constitucionales y está sometido sólo a la Constitución y a su Ley Orgánica".
 

Se veia venir. Y no será porque algunos ciudadanos, incluso desde la calle, no vienen demandando orden en este despropósito. Recuerdo con precisión que el primer acto al que asistí como militante de UPyD, el 6 de diciembre de 2007, fue para exigir la independencia del poder judicial delante del edificio de Tribunal Constitucional. Un Alvaro Pombo vibrante, leyó un manifiesto que puede releerse facilmente en la Web. ¡Qué razón teníamos !. Pero seguiremos reclamando, porque estoy convencido de que la crisis está próxima y de que el largo camino recorrido ya por muchos demócratas, dará  sus frutos. Deseo, necesito el optimismo de todos, porque ahora, será mas fácil que antes. Ellos se han ejercitado mucho. Han aprendido a manejar los engaños para ofrecerlos a los que quieren ser engañados. Han sabido retorcer el derecho y encontrar las fisuras que otros les han abierto para entrar. Pero nosotros también les conocemos mejor y sabremos arrojarles antes, de donde nunca debieron estar.